Rollitos de jamón con queso
Untar dos lonchas de jamón de York con queso ligero tipo cottage, enrollarla, meterla una hora en la nevera y cortarla en trozos de 2 o 3 cm. de largo. Poner un palillo en cada trozo.
Barritas de zanahoria
Zanahorias pequeñas y tiernas peladas y cortadas a lo largo en barritas. Se conservan bien en la nevera y siempre está a mano.
Yogur con piña
Cortar una rodaja de piña en su jugo en trozos pequeños y mezclar en una taza con un yogur desnatado.
Montado de queso y mermelada
En una rebanada de pan de molde extendemos un quesito (o una loncha) y extendemos por encima media cucharadita de mermelada light.
Tomate con orégano
Cortar un tomate en rodajas y ponerlo en un plato, salarlo un poco, echar por encima un chorrito de aceite de oliva y espolvorear una cucharadita colmada de orégano.
Pinchos de tomate con queso blanco
Cortar un tomate en rodajas gruesas y luego éstas en cuadrados. Salar los trozos y colocar sobre cada uno un trocito de queso fresco o campesino bajo en grasa, atravesando cada pincho así formado con un palillo para que sean fáciles de coger.
Nota:
Por supuesto, son preferibles las versiones "light" de los diferentes productos: mermelada, queso en porciones o lonchitas, mayonesa, etc. Es mejor que el pan que usemos para los montados sea de barra en vez de molde (éste tiene más grasa) y, por supuesto, integral.
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